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Chorros del Varal, un santuario de agua y naturaleza


Los Chorros del Varal no solo son una joya natural del estado de Michoacán, sino también una experiencia que combina la aventura, la conexión con la flora y fauna y la oportunidad de admirar la belleza única de las tierras purépechas

En el estado de Michoacán, el “alma de México”, existe un paraíso natural que sobresale en la región, una impresionante serie de cascadas de 40 metros de altura. Este sitio que nace de las bondadosas tierras purépechas se llama Chorros del Varal, una joya acuática donde abunda la vegetación y reina un ambiente sereno. Este, es el lugar perfecto para quienes buscan vivir experiencias al aire libre en su máximo esplendor.

Estas imponentes caídas de agua situadas a solo 14 kilómetros de los municipios de Los Reyes y Peribán, forman parte de un área protegida que abarca más de 72 hectáreas de extensión que comprende el cajón del barranco desde el Salto hasta las Juntas.

Para disfrutar de este refrescante spot natural hay que descender 786 escalones, un recorrido fabuloso que sumerge a cada visitante en el paisaje único que ofrece la ladera de la montaña. Es durante este paseo que se pueden apreciar a detalle las caídas de agua que brotan desde las grietas del suelo, las cuales son alimentadas por un río subterráneo, que da un toque misterioso y fascinante a la vez.

Al llegar abajo hay un puente que atraviesa la zona y ofrece dos opciones para continuar esta aventura. Aquellos que eligen la primera pueden descender hacia el río para relajarse con el ruido que provoca la corriente, armar un delicioso picnic o maravillarse con el paisaje espléndido del lugar. Los que decidan elegir la segunda opción harán un poco de ejercicio, ya que podrán subir al mirador, el mejor punto para admirar los Chorros del Varal en su máximo esplendor.

Además de esto, se pueden hacer otras actividades como observación de aves, flora y fauna y practicar senderismo. Otro dato importante es que, en enero de este año, este sitio celebró el 21 aniversario de su nombramiento como Área Natural Protegida (ANP).

Es un área que resguarda importantes elementos de bosque mesófilo y especies importantes como el venado cola blanca y el puma. Además, cuenta con la infraestructura básica para ofrecer ciertos servicios a los visitantes.

Por todo esto, los Chorros del Varal no solo son una joya natural del estado de Michoacán, sino también una experiencia que combina la aventura, la conexión con la flora y fauna y la oportunidad de admirar la belleza única de las tierras purépechas.

Fotografía: Cortesía Prensa Michoacán